5 consejos para que la música te ayude a vender

Influye directamente ene nuestro comportamiento, en nuestro estado de ánimo y en nuestra forma de actuar ante determinadas situaciones. En un negocio la música puede ayudarte a aumentar tus ventas, a potenciar un determinado comportamiento de compra útil para el negocio y a motivar a tus empleados. La clave es saber usarla de la forma más adecuada en función de tu sector y público objetivo.

A continuación te damos 5 consejos para aprovechar al máximo la música en tu negocio:

1. Crear un buen ambiente musical que llame la atención del público:

La música nos ayuda a crear ambiente, hace que tu local sea más atractivo y a que la gente se sienta cómoda y a gusto mientras mira tus productos y decide si comprarlos o no. Pero no solo es importante para crear un buen ambiente, la música también debe atraer al cliente. Si se siente cómodo pero no le llama la atención, no estará generando el efecto que esperamos. Por eso es importante conocer a tu público y plantearte preguntas como “qué tipo de música le gusta a mi cliente?” o “¿qué música escucha el tipo de público que quiero tener?”

2. Busca el volumen adecuado para cada situación

La música no debe ser el foco principal, sino que debe sonar de fondo. El cliente puede percibirla, oírla, pero mejor que no se distraiga de la acción que está realizando y del que ha venido a hacer a tu negocio. Según el momento del día, el sector de la empresa o la actividad que vayas a realizar, el volumen adecuado varía. Por ejemplo para la inauguración de un local o durante una actividad promocional puede ser necesario un volumen más alto. Al contrario, para crear un ambiente más tranquilo, relajado, de sugestión a la compra de tus productos, el volumen ideal será más suave.

3. El ritmo también importa

El ritmo importa tanto como el volumen. La música más lenta te ayudará a mantener calmada a la clientela y con ganas de pasar más tiempo en la tienda. Si tienes un negocio de comida rápida, quizás es más conveniente que la música también lo sea, para que desocupen antes los lugares.

4. Escoge adecuadamente el sistema de sonido

No importa lo bien que hayas escogido el hilo musical de tu negocio si tienes un equipo de sonido que no suena bien o no está bien instalado. Mucha gente desconoce la importancia de cómo distribuir y calibrar un sistema de sonido en un espacio. Una mala colocación de los altavoces creará grandes diferencias de volumen en el local, con zonas donde la música casi no se oirá, y otros donde molestará. Además, se pueden crear fugas de sonido no deseadas que pueden llevar a problemas con los vecinos por incumplimiento de la normativa acústica.

Existen una gran variedad de sistemas de sonido pensados para el ámbito comercial y que se adaptan en funcionalidad y diseño a cada situación: tiendas, grandes superficies, hostelería, oficinas… Muchos de ellos con dispositivos que permiten gestionar mucho más que el volumen de la música: pueden regular el volumen por zonas, franjas horarias, limitarlo, crear avisos, gestionar la música vía pen-drives o Spotify sin necesidad de un ordenador, tableta o móvil.

5. Una mala acústica: El enemigo invisible que lo puede arruinar todo

Hay un enemigo invisible que muchos negocios pasan por alto: una mala acústica del local. La mala acústica no solo hará que la música no se oiga bien o no se entienda, también provocará reflexiones sonoras en el espacio que crearán ruido de fondo, convirtiendo tu punto de venta en un espacio hostil, donde la comunicación es difícil y provocando que muchos de tus clientes se sientan incómodos y se vayan rápidamente antes de realizar ninguna compra. Hay estudios que demuestran que las ventas en un local con mala acústica son un 28% inferiores, un efecto dramático que no se puede tomar a la ligera.

Esperamos que estos consejos te ayuden a crear mejores ambientes en tu empresa y a convertirla en toda una experiencia tanto para clientes como para empleados. ¡Dale al play!